Iglesia critica desalojo de indígenas, falta de agua y alta deforestación en el Chaco

El padre Miguel Fritz, desde el inicio y hasta el final de su homilía, en el novenario de la Virgen de Caacupé, abordó la problemática de las comunidades indígenas que son desalojadas de sus tierras. Cuestionó que en el Chaco, “el tan elogiado progreso, traiga una galopante deforestación”.

El padre Miguel Fritz, administrador del Vicariato del Pilcomayo, presidió este domingo la misa del sexto día de novenario en honor a la Virgen de los Milagros de Caacupé, bajo el lema “Orar y salir al encuentro de los más pobres y vulnerables” y ante la presencia masiva de las comunidades indígenas.

Desde el inicio y hasta el final de su homilía, describió la situación de las comunidades indígenas en el país y la incansable lucha que llevan sobre sus hombros por el derecho a la tierra.

“Impresionante la cantidad y el esfuerzo que han hecho, en gasto y organización, para venir aquí porque saben y sienten que nuestra Madre les espera, pero han venido también para darnos la oportunidad de ocuparnos de ustedes y de preocuparnos por ustedes”, reflexionó.

También, exteriorizó las preocupaciones que viven ante la cantidad de jóvenes entregados al alcohol, las drogas y, en otros casos, los que toman la decisión de quitarse la vida.

El sacerdote siguió indicando que otra inquietud que tienen los pueblos originarios es el arrendamiento de tierras indígenas a gente de afuera y denunció a los líderes que no sirven a sus comunidades, sino que a sí mismos.

Igualmente, señaló a aquellos que miran con recelo las tierras indígenas “a causa del hambre insaciable de aprovechar esas tierras”.

“Hay gobernantes que no comprenden que la tierra no es solamente un medio para producir y hacer plata, sino que muchos indígenas la sienten como una madre, es el lugar donde los indígenas sienten sus raíces, raíces que no quieren ni deben perder”, prosiguió.

La regularización de tierras es un problema no resuelto por ningún gobierno

Fritz siguió reprochando que ningún gobierno, después de la dictadura, logró resolver la regularización de tierras y, con mucha indignación, lamentó que año tras año se tenga que repetir los desalojos injustos y violentos.

“Es increíble que año tras año tengamos que repetir este flagelo de los desalojos injustos y violentos”, acotó.

Advirtió que aquellos que luchan por los derechos indígenas están en peligro de terminar como Arnaldo Benítez Vargas, uno de los líderes de la comunidad de los Paĩ Tavyterã, zona de Cerro Corá, Amambay, que falleció luego de ser brutalmente agredido por un grupo de invasores de las tierras indígenas.

Miguel Fritz advirtió a los legisladores y legisladoras que la tierra indígena no se toca y dijo que aquellos que invaden están en pecado, finalizó la expresión con el aplauso masivo de los feligreses.

“Señoras y señores legisladores: a la tierra indígena no se toca, los que invaden tierra indígena, están en pecado, los que desalojan injusta y violentamente a territorio indígena, están en pecado”, expresó tajante.

La galopante deforestación en el Chaco:

Continuando con su homilía, expuso que “el tan elogiado progreso y desarrollo”, al menos en el Chaco, tiene sus fuertes luces y sombras.

“La galopante deforestación es evidenciada por la impresionante cantidad de camiones que llevan rollos y carbón, que es causa de sequías prolongadas, un aumento del calor sofocante. Mitad de noviembre fallecieron seis personas por el calor en un solo día y solo en Boquerón, ¿ese es el progreso, eso queremos?”, se preguntó.

Falta de agua potable y luz:

Tampoco dejó pasar la oportunidad de reclamar la falta de agua potable y energía eléctrica en el territorio chaqueño.

“La ANDE y la Essap se quejan que ya no pueden dar abasto a la creciente demanda de energía y de agua, ya que en las grandes estancias, que producen soja y algodón, por cierto, transgénicos y con fumigación tóxica, extraen con bombas poderosas agua del acuífero”, arremetió.

Insistió en la urgente necesidad de que los pueblos indígenas tengan más derechos.

“Son duras las experiencias y conocimientos que adquirimos cuando nos acercamos a los pobres y a las causas de su pobreza”, concluyó.

El novenario de este año lleva el lema “Señor, enséñanos a orar”, se realizará a las 07:00 y será transmitido por Telefuturo los nueve días.