Con barricadas y pelotones policiales en las inmediaciones y controles antibombas adentro, en el Congreso se aguarda la sesión ordinaria de hoy. El plato fuerte es la convocatoria a una extraordinaria para la pérdida de investidura de Dionisio Amarilla.

Si bien el control contra explosivos es rutinario antes de cada sesión en el Senado al menos, lo que no es habitual es el despliegue de las vallas de seguridad y de un nutrido número de agentes policiales para custodiar la fachada de la Cámara Alta.

En la fecha se prevé la presencia de varios grupos de manifestantes. Entre ellos, por ejemplo, ya se encuentra presente un grupo de adultos mayores que reclaman una ayuda estatal para las personas de más de 60 años.

Para las 13:00 también se estima la presencia de personas que reclaman la pérdida de investidura del senador Dionisio Amarilla. Si bien no hay aún convocatoria oficial a sesión extraordinaria para tratar el tema, el presidente del Congreso, Silvio “Beto” Ovelar, adelantó que la hará efectiva hoy.

Por su parte, en el interior de la sala de sesiones, un equipo de seguridad controló curul por curul con un espejo en busca de eventuales explosivos. El procedimiento es rutinario, pero aun así despierta la atención.